16 ago 2014

Posesión

Cura, remedio y enfermedad.
Ninguna me convence en realidad.
La muerte prefiero yo.
No importa lo que digan los demás.
No lo saben ni tampoco yo lo sé.
Es importante comprender.
Es imposible recordar y fácil olvidar.
Olvidar mi vida en un abrir y cerrar de ojos.
Mi mente ya ha muerto pero yo sigo aquí.
Varado en un desierto salvaje.
Colorido y de un calor invernal.
Varado entre las millones de almas desafortunadas.
Estancado en mi propio ser.
Puedo escapar, pero  no puedo hacerlo.
Es difícil de pensar sin mente.
Pero igual lo sigo haciendo.
No sé cómo, pero lo puedo hacer.
La mente no está.
Pero mi cuerpo sí.
Pero lo que se, que el que piensa no soy yo.

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